Ir de tapas: curiosos ritual
El tapeo o ir de tapas es una costumbre muy española, que consiste en ir de bar en bar tomando algún tipo de bebida alcohólica acompañada de deliciosos platillos pequeños llamados tapas.
Su contenido varía según la tradición gastronómica de cada región y según las especialidades de cada bar (que a su vez parecen competir por ofrecer las mejores de la zona o de la ciudad).
Al salir del trabajo se suelen juntar dos o tres amigos para emprender la marcha hacia un bar, en el que, sin tomar asiento, ingieren una bebida y una porción de tapas, terminadas ambas, pagan la cuenta y emprenden la marcha hacia a otro bar, repitiendo varias veces en una tarde este curioso ritual.
Las tapas suelen ser muy diversas, una porción de Tortilla madrileña, Aceitunas(en sus diferentes versiones), una combinación de chorizo y jamón, un pulpo a la gallega, una porción de queso de cabra horneado y un largo etcétera.
Tanto el origen de esta costumbre como su nombre mismo, no se conocen con certeza, pese a que existen varias leyendas que compiten por lograr aceptación general. Lo cierto es que hay versiones documentadas desde el siglo XVIII del uso de trozos de jamón, chorizo, queso o incluso pan para cubrir (tapar) los jarros de vino, posiblemente para evitar el ingreso de polvo o de las moscas. El asunto es que al final, estas "tapas" terminaban sirviendo de pasante o acompañante de la bebida.
Hoy en día, muchos restaurantes también han incorporado las tapas como platillos que se sirven como entrada, mientras los comensales eligen el menú de su preferencia.