Esta es una sencilla receta que se prepara al estilo francés, además de su delicioso sabor, tiene un toque de elegancia que la hace apropiada para servir en una ocasión especial.

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Instrucciones de preparación

Cortar la cebolla y el puerro en láminas delgadas. Cortar la pechuga en cubos de unos dos centímetros.

En un bol mediano poner la harina y mezclarla bien con la mantequilla hasta que la mezcla sea uniforme.

Poner a fuego bajo una sartén con una cucharada de aceite de oliva. Adicionar la cebolla, el puerro, la pasta de ajo, un poco de sal y pimienta. Dejar cocer durante uns 20 minutos revolviendo de vez en cuando.

Mientras tanto, rociar el pollo con un poco de sal y pimienta. Poner al fuego fuerte una sartén amplia con una cucharada de aceite de oliva. Una vez caliente, poner los trozos de pollo y dorarlos durante 3 minutos, revolviendo frecuentemente con una cuchara de madera. Retirar y reservar.

Poner una olla al fuego alto con la leche y el caldo. Una vez comience a hervir, adicionar la mezcla de harina y mantequilla. Revolver constntemente durante 5 minutos hasta que tenga consistencia espesa. Retirar del fuego. Adicionar el pollo, la cebolla y el puerro. Servir cada porción en una cazuela (que pueda introducirse en el horno). Espolvorear cada cazuela con el queso y llevar al horno precalentado a 200°C. Hornear durante 7 minutos.

Servir.

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